Isabel Sánchez Arán, una referente en el mundo de la apnea.

Isabel Sánchez Arán, campeona de España de apnea estática, subcampeona de España en la categoría de profundidad en inmersión libre, una ilicitana que no solo ha llevado a su ciudad a muchos lugares increíbles, sino que además se convierte en una referente femenina de un deporte que ya rompe estereotipos.

La apnea o buceo libre (freediving) es un deporte extremo, el cual tiene como base la suspensión voluntaria de la respiración dentro del agua mientras se recorren largas distancias o se desciende hasta grandes profundidades. Isabela -como la llaman sus amigos-, una competidora nata, con una gran conexión con el agua y sobre todo con la vida nos desgrana esa pasión que descubrió casi por casualidad y también cuales son las aspiraciones de futuro, o como ella dice, a corto plazo de una sirena.

Una madrileña de nacimiento e ilicitana de sentimiento ¿qué fue esa «causalidad» que te lleva a practicar deportes acuáticos o mejor dicho, «a amar el mar con toda tu alma»?

No soy madrileña, mis padres son de Almería y emigraron a las grandes ciudades buscando un futuro mejor, y nací allí, en Madrid pero el rumbo de sus vidas hizo que termináramos en Elche. Por lo que puedo afirmar que soy una viajera de nacimiento y con una gran pasión por la ciudad de las palmeras.

Para mí el mar siempre ha sido una válvula de escape. Dentro del agua siento la no gravedad, la ausencia de normas y una expresión de libertad adictiva. Descubrí el buceo casualmente en un viaje con amigos por el Caribe. Me encantó la experiencia, y el instructor de aquel momento ya detectó un algo especial en mi relación con el agua.

Más tarde, y por vueltas que da la vida, también tuve la ocasión de navegar durante unos meses por aquellas islas haciendo barco-stop a cambio de ayuda como tripulante en barcos veleros de particulares. Aquella vivencia fue algo único e incomparable, que hizo que el mar y yo entendiéramos que entre nosotros había una conexión muy especial.

Soy algo polifacética y, aunque mi formación académica, en principio, se desarrolló en el ámbito de los idiomas, el deporte ha sido siempre uno de mis intereses. Persiguiendo el dedicarme a ello profesionalmente, decidí pasar a la acción y darle un lugar prioritario en mi vida. Terminé haciéndome instructora de buceo con botella y trabajé en Chipre por varios años. Finalmente, fue a través de esto que llegué a conocer el maravilloso mundo de la apnea deportiva.

La gran casualidad que me introdujo en el mundo del freediving o lo que es lo mismo, bucear a pulmón, aguantando la respiración, fue que mi jefe observó en mí cualidades y me animó a competir… ¡y resultó que gané!

Ese «talento natural» con el que te bautizan en Chipre sobre tus cualidades físicas, y tu deseo de ser atleta de élite ¿cómo lo vas nutriendo?

Si tengo un algún talento natural, debe ser el de no respirar -asegura entre risas-. Desde el primer día, ya aguantaba más de 5 minutos sin mayor esfuerzo, y entrenando supero los 6, pero es algo que no es fácil y que cuesta conseguirlo.

La competición la entiendo como una fuente de motivación. Es la celebración de nuestro deporte y queremos dar lo mejor de nosotros. Lo que más me nutre es el apoyo de la gente que me sostiene. Ni siquiera tengo un sentimiento de competitividad hacia mis rivales, todo lo contrario, somos compañeros.

Este deporte me permite evolucionar en el autoconocimiento, explorar y expandir mis límites, tanto físicos como mentales. La práctica de la apnea me ha abierto una ventana a la parte inconsciente, a conocer las reacciones de mi cuerpo, a querer indagar más sobre qué sensaciones pueden estar por llegar en cada progreso que consigo.

La apnea, un deporte emergente que ha roto estereotipos femeninos y masculinos, o ¿eres tú, quien los está rompiendo un poco en este deporte?

La apnea es un deporte que se practica en grupo sin distinción de géneros. Aunque en los campeonatos se establece una clasificación por sexo, la competición va por dentro, con uno/a mismo/a, por el afán de superación y conocimiento propio y no tanto por rivalidad, como en otros deportes.

Aunque los hombres tienen, a priori, mayor capacidad pulmonar y masa muscular, es de tener en cuenta que estamos hablando de una actividad con un componente mental muy elevado y las mujeres pueden, si se lo proponen, superar a los hombres. Me atrevería a decir que solo en la top élite mundial se evidencian realmente las diferencias en cuanto a limitaciones fisiológicas.

Si rompo algún estereotipo, sería más bien en lo que respecta a la otra porción de mi vida, ya que el mar es un entorno mayoritariamente de hombres.

Hablas de que tienes un coach deportivo que te va guiando, ¿cómo valoras su aportación en tu vida para conseguir tus objetivos?

He tenido varios coaches desde que empecé. El primero que tuve fue mi jefe del centro de buceo con botella y, después, llegó un momento que él me tuvo que encomendar a otra persona con más experiencia.

Para mí lo más importante es que me entienda, que me mire a los ojos y sepa que llevo dentro, que me arrope y me de fuerza para enfrentarme a cualquier competición. Son coaches deportivos pero forman parte de tu vida, y su profesionalidad y puntos de vista me ayudan a superarme día a día.

Yo no sería nada sin la gente que tengo alrededor, compañeros, amigos, familia y sobre todo esas personas llamadas “coach” que me han ayudado tanto a crecer.

Financiarse en el deporte es complicado, tú además colaboras con empresas y escribes en revistas profesionales. Y también tienes un blog propio. Háblanos de él.

La apnea es un deporte que tiene mucha logística, no es como ponerse unas zapatillas y salir a correr. Necesitas material de buceo, un barco para salir al mar si no tienes suficiente profundidad cerca de la orilla y un equipo de gente te acompañe. Si, además, te planteas competir a alto nivel, necesitas que todo esto sea de una calidad profesional y los costes van a correlación. Siempre intento relacionarme con entidades cuya filosofía esté en sintonía los valores que la apnea representa.

Y sí, también colaboro con el magacín digital “Apnéalo” para dar a conocer nuestro deporte. Aparte de esto, escribo un blog llamado “Vivo el mar y soy mujer”, título inspirado en el blog de otra ilicitana que escribe sobre el running, donde hablo de todas esas inquietudes que tengo y cómo el mar las ha ido, en ocasiones, calmando; en ocasiones, avivando. Pero realmente el blog es una necesidad de encontrar personas que conecten con mi misma pasión.

Una ilicitana a la que nos permitimos el lujo de llamar «guerrera» pero una guerrera solidaria y comprometida con el medio ambiente. Háblanos de  ese proyecto social a nivel local sobre los jabones.

Me encantaría llegar a conseguir el patrocinio necesario para poder preparar la temporada de pre-competición en el Mar Rojo, meca de peregrinación para los apneístas por su gran diversidad biológica. Allí se encuentra un accidente geológico que llamamos de “Agujero Azul”, en realidad un pozo sumergido bien abrigado y protegido de las inclemencias meteorológicas, en el que no hay peligros por sus características. Perfecto para la práctica de la apnea.

Y ese sueño lo combino con la promesa personal de promover los jabones biodegradables allí, ya que los utilizamos para poder ponernos el traje de neopreno y el que se está usando allí actualmente contamina y mucho.

Otra cosa que no soporto son las ruedas de coches en los arrecifes de corales, deshacerme de ellas sería otro gran sueño. Ojalá pudiese poder estar más tiempo allí en Egipto y llevar a cabo estas hazañas medioambientales.

¿Eliges a tus patrocinadores o te eligen? ¿Son tus valores los que marcan esas decisiones?

Los patrocinadores surgen y hay una relación de aprobación mutua. Aunque, en principio, aparecen de una necesidad mía. Es cierto que ahora necesito colaboraciones más importantes para poder dar continuidad a mi carrera en el plano internacional. Me gustaría trabajar en este sentido con empresas ligadas a mis valores y marca personal.

Los deportistas necesitamos financiación y ayudas institucionales. De otra manera es una misión casi imposible ¡Ahí lo dejo!

Háblanos de ese momento bajo al agua, el que apuras hasta volver a la superficie, ¿cómo son  esas habilidades, qué te hacen sentir?

En la apnea existen varias modalidades de buceo y las sensaciones varían en cada una de ellas. La más cruda es la apnea estática (hacer el muerto boca-abajo), pero existen otras modalidades de distancia en piscina y de profundidad en mar: una de nado a braza, otra con aletas y la de inmersión libre, en la cual nos impulsamos hacia abajo tirando de una cuerda.

La de inmersión libre es la que más me relaja, la que me permite bajar más profundo, superando los 70 metros. A partir de un cierto punto, sobre los 20 o 30 metros, cuando el aire de mis pulmones está muy comprimido por la acción de la presión del subacuática, ya no floto y caigo al fondo como una piedra. Me hundo.  

En ese punto me dejo ir como un peso muerto y siento que es un sueño, como si hibernase. Las otras disciplinas son más técnicas y requieren más atención, las sensaciones son diferentes. En la de nado a braza, por ejemplo, me canso muchísimo. En los últimos metros ya casi no me responden los músculos.

He quedado campeona de España de apnea estática. Esta disciplina se basa en la alternancia de concentración y desconcentración, en relajar tu cuerpo y vaciar tu mente para lograr consumir la menor cantidad de oxígeno posible y alargar así el tiempo de apnea. Quieres quedar lo más cerca posible de tu límite… ¡pero sin pasarte o estarás descalificado! Es un deporte que implica desarrollar un cierto autocontrol y fuerza mental, pero cuando todo acaba y saco la cabeza del agua, es como volver a nacer.

¿Cuáles son tus proyectos de futuro cuáles son?

No soy de hacer planes a largo plazo en la vida. En el deporte, pues, como todo deportista, soñamos con Las Olimpiadas. Pero este tema todavía está muy en el aire, ya que, aunque se está estudiando, a día de hoy todavía no somos deporte olímpico. Ahora mismo lo que busco es ser campeona de España en las modalidades de profundidad y, además de la estática, que ya soy.

Actualmente me estoy entrenando en un centro de alto rendimiento en Grecia, a la vez que me formo como instructora. Otro deseo es el de poder ser seguir trabajando para promover y dar a conocer la apnea deportiva en Elche, y en la provincia de Alicante, ahora de una forma más profesional.

Por supuesto, el de seguir escribiendo y difundiendo a travé de mi blog y en Apnéalo, y llevar a cabo mi proyecto de los jabones biodegradables.

¿Y cómo te recibe tu ciudad, Elche?

Me han recibido estupendamente. Han publicado en diversos medios la crónica de mi actuación en el Campeonato de España y he recibido muchos mensajes de apoyo, desde desconocidos hasta la asociación de vecinos de mi barrio.

Además, la solidaridad ha sido muy positiva, y me han ofrecido varias piscinas para poder entrenar. Pero creo necesario, y lo vuelvo a recalcar, la necesidad de que se le dé valor y apoyo al deportista desde las instituciones públicas, aunque no sea un deporte de pelota.

Los deportistas que hemos apostado por competir de forma profesional nos vemos en situaciones muy arduas para poder mantenernos a flote económicamente. Es muy importante que ese apoyo también venga de las instituciones, el deporte es vida.

Y así fluye, como el agua una entrevista en la que Isabela ha contagiado su espíritu competitivo, su fortaleza, pero sobre todo, una pasión que está muy alineada con todo su ser. Una campeona ilicitana que se ha convertido en una guerrera para TuEscaparate.

¿Dónde localizar a Isabela?

• Facebook: ttps://www.facebook.com/la.isabela
• Instagram: https://www.instagram.com/isabela_s.aran/
• Blog: https://vivoelmarysoymujer.wordpress.com/

Un reportaje patrocinado por SportShower